02 junio 2006

TE REGALO LA LIBERTAD (Pol Ten Bock)

Te regalo la quietud de los brazos,
el deseo ahogado de tus manos,
la oscuridad de tus ojos
cubiertos por negra seda.

Te regalo la cuerda que tensa tus miedos,
la que crea el vértigo hacia lo desconocido
don de confundes y temes dolor o placer.

Te regalo un primer momento,
un instante de vacío para sentir
que una boca recorre tu cuerpo.

Te regalo la caricia de un tierno aliento
visitando tus cimas,
el tacto efímero de unos dedos que te perfilan,
el roce de una piel que adivinas.

Te regalo al oído
la entregada respiración
de aquel que aparece en tu fantasía,
el sonido que bombea su corazón
al rechazar de ti sentir el tacto,
el latir de su obsesivo deseo por hacerte feliz.

Te regalo el manto de calor
que surge de tu cuerpo,
el ardor propagado por el sentir anudado.

Te regalo un primer jameo,
como el que deja el mar al mezclarse con la lava,
el primero de muchos dónde tus notas de goce
quedarán encerradas.

Te regalo la impotencia de dar,
mezclando tus ganas con el placer que te dan.

Te regalo quedar aislada
en un mundo de aguas,
de ahogadas palabras.

Te regalo el espasmo del vientre, la contracción
en los pétalos de rosa de tu interior,
el ladeo del sueño y el blanco sendero.

Te regalo la luz del final,
el estallido de fuego,
el crujir de las brasas
que alejan el celo.

Te regalo el silencio de un beso
de quien te ve disfrutar,
de quien sabe que por fin
te ha logrado liberar.

Pol Ten Bock
Porque hay regalos que nacieron juntos, y qué mejores manos que las de una sirena para conservarlos en el fondo del mar.